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Diálogos

Las pequeñas empresas enfrentan la nueva ley tributaria

April 12, 2018
Un propietario de pequeño empresario haciendo impuestos en su oficina
Muchas de las provisiones de la nueva ley fiscal pueden beneficiar los propietarios de pequeñas empresas. (Photo credit): Gettyimages.com/Tetra Images

Cómo los empresarios pueden aprovechar la nueva ley tributaria ahora para maximizar sus dólares en el 2018.

Los propietarios de pequeñas empresas están examinando de qué manera la nueva ley tributaria afecta las compañías y a los empleados, y si necesitan realizar algún cambio en 2018 para adaptarse a las nuevas reglamentaciones aprobadas por el Congreso en diciembre de 2017. Muchas de estas nuevas disposiciones conceden mayores deducciones y pueden ser beneficiosas para los propietarios de negocios.

De acuerdo con una encuesta reciente realizada por Insureon, una proveedora de seguros radicada en Chicago, junto con el sitio de redes empresariales Manta, un importante número de empresarios cree que el proyecto de ley fiscal afectará sus compañías de manera positiva. Según el estudio, el 83 por ciento dijo que los nuevos cambios fiscales ayudarán a sus negocios. De dicho número, el 38 por ciento dijo que contratará más empleados, el 28 planea invertir en nueva tecnología o en investigación y desarrollo para ampliar sus compañías, el 13 por ciento dará bonos y el 10 por ciento ofrecerá nuevos beneficios a los empleados, como planes de jubilación y salud. El estudio también reveló que el 80 por ciento de los empresarios apoya el proyecto de ley.

The Brookings Institution, una organización de investigación y políticas públicas sin fines de lucro de Washington, D.C., reveló que el 95 por ciento de los negocios son entidades con ingresos transferibles, lo que significa que los negocios no están sujetos a impuestos por ingresos. La nueva ley tributaria permite que el 20 por ciento de los ingresos netos transferibles de una empresa se deduzcan de los impuestos.

Ajustando pagos trimestrales

Con menores tasas tributarias, los propietarios de pequeñas empresas que realicen pagos tributarios trimestrales al IRS basados en sus ingresos estimados deberían analizar el ajuste de sus cuotas con su CPA, dice Chris Colyer, un socio del grupo de servicios tributarios de WISS & Company, una firma contable radicada en Livingston, N. J.

Asignar los ingresos adicionales al plan 401(k) de la compañía o IRA será lo más beneficioso porque los propietarios de pequeñas empresas no solo tendrán un mayor ahorro jubilatorio adicional, sino que podrán aprovechar el ahorro de impuestos. Proveer fondos para mayores contribuciones jubilatorios destinadas a los empleados también otorgará ventajas tributarias.

“Los propietarios que pongan el dinero adicional en una cuenta de cheques o ahorros no recibirán el beneficio tributario”, dijo.

En vez de gastar los ingresos adicionales en expandir el negocio, los propietarios deben moverse con cuidado y esperar varios meses o más antes de tomar decisiones importantes, recomienda Colyer.

“No se apresuren a tomar decisiones rápidas, ya que esta es la primera vez que cae dinero del cielo”, dijo.

La deducción del 20 por ciento liberará fondos para que las compañías sigan sus otras iniciativas o simplemente aumenten sus ganancias, dijo Paul Jacobs, un planificador financiero certificado, agente inscrito y director de inversiones de Palisades Hudson Financial Group, radicado en la oficina de Atlanta.

“Esto afecta a contratistas independientes y propietarios únicos y, a cambio, ayuda a la clase media”, dijo.

La deuda se hace más costosa

Las leyes tributarias del pasado siempre han alentado a las compañías a endeudarse financieramente porque el gasto por intereses era totalmente deducible, dice Colyer.

“Si tuviera sus preferencias, como fundador o presidente de una compañía, tendría más deuda que capital para disminuir los impuestos”, dijo.

La tendencia ahora ha cambiado porque la nueva ley tributaria limitó las deducciones del gasto por intereses sobre las deudas. La limitación sobre las deducciones incluye préstamos de la SBA e hipotecas sobre bienes raíces, pero solo afecta a pequeñas empresas que hayan generado ingresos brutos por un total de al menos $25 millones durante los últimos tres años.

Ahora las compañías solo pueden deducir una porción de sus costos por intereses netos o el 30 por ciento de los ingresos antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA). No hay excepciones a esta cláusula, como la deuda contraída antes de la aprobación de la ley tributaria.

“Por primera vez, un proyecto de ley tributaria pone un límite a la cantidad de interés que se puede deducir y está moviendo el péndulo nuevamente al capital”, dijo Colyer.

La modificación hace que endeudarse sea más costoso y el gobierno ya no alienta a las compañías a adquirir mayores niveles de deuda, dijo.

“Esta es una desventaja para las compañías con alto coeficiente de endeudamiento y desalienta el uso de la deuda”, dijo Colyer.

Mayores deducciones para la compra de equipos

Anteriormente, cuando las compañías compraban equipos nuevos, tenían que distribuir los costos de la depreciación durante varios años.

Ahora, la ley tributaria permite a las compañías deducir el 100 por ciento del costo en el primer año. La modificación es beneficiosa para las compañías e incentiva las compras de bienes de equipo, como un horno nuevo de $100,000, una impresora 3-D o inclusive una propiedad.

“Si las compañías compran equipos nuevos, pueden recibir deducciones de impuestos importantes y reducir los impuestos que pagan”, dice Colyer.