Estilo De Vida
Novacane: un bar hípster para una nueva generación
Una madre y una hija aprenden a incorporar lo mejor de cada generación en un negocio.
En una agitada arteria justo al Sur del Centro de Los Angeles, camiones de carga pasan haciendo ruido por edificios industriales, cantinas mexicanas y tiendas. De repente, en medio del desabrido entorno, se observa un fogonazo de color: cabello suelto de rosa intenso con pestañas largas y labios seductores, que observan de manera desafiante a los transeúntes desde un enorme mural. Al lado, letras de neón rosa dicen: Novacane Bar and Grill. Este bar hípster local ubicado en Huntington Park es la creación de Angie Martinez de 26 años, quien recibió financiamiento de East West Bank para hacer realidad su idea de una pequeña empresa.
Ubicado en un complejo de pequeñas tiendas de un vecindario predominantemente latino, Novacane Bar and Grill es un bar hípster en un área del sudeste de Los Angeles que, sin duda, no es un área de ese estilo. Trabajos del artista urbano James Haunt y de Natasha Lillipore cubren las paredes internas y externas del bar. Los cócteles tradicionales llevan el nombre de canciones: “Lovefool” tiene tequila, zumo de mango, lima orgánica fresca, sal de chile Tajín, acompañado con mango especiado. Comida mexicana tradicional, como carne asada, tacos y taquitos caseros, se sirven junto con opciones veganas, como coliflor al horno picante.
“Quería traer todo el ambiente artístico aquí”, dice Martinez. “Investigué la demografía del lugar y me di cuenta de que no había nada que tuviera el estilo del Centro de LA, o un bar al cual pudieran ir los jóvenes. Me dije a mí misma: voy a tener el primer bar con ese estilo de la ciudad”.
"Investigué la demografía del lugar y me di cuenta de que no había nada que tuviera el estilo del centro de LA, o un bar al cual pudieran ir los jóvenes."
Huntington Park solía ser un centro de actividad de compras y entretenimiento. Los inmigrantes mexicanos y centroamericanos acudían masivamente a la animada Pacific Avenue para comprar vestidos de novia y botas de vaquero. Sin embargo, como los tiempos han cambiado, el comercio ha disminuido considerablemente.
El planificador urbano James Rojas dice que se debe al cambio de gustos en la nueva generación de latinos nacidos en los EE. UU.
“Cuando los nuevos inmigrantes buscaban sus propios lugares de supervivencia económica, social y cultural, Pacific Avenue era ese lugar”, dice Rojas. “Sin embargo, la nueva generación de latinos está ampliando los límites de sus padres y está incorporando nuevas ideas estadounidenses de urbanismo. Son una cultura híbrida de valores latinos tradicionales incorporados en las tendencias económicas, sociales y culturales de Estados Unidos”.
Dicha tendencia se está difundiendo, ya que ahora aproximadamente 6 de 10 hispanos son milenarios o más jóvenes. Rojas dice que otros distritos comerciales tradicionales, como Whittier Blvd. del Este de Los Angeles, el corredor Broadway del Centro de LA, el centro comercial El Mercado del Este de Los Angeles y Valley Mall de EL Monte, están teniendo dificultades porque la nueva generación de latinos nacidos en los EE. UU. busca cosas diferentes a sus padres.
Y este intento de superar la brecha generacional es el que protagonizan Martinez y sus padres, que son los socios empresariales de este negocio familiar.
"Sin embargo, la nueva generación de latinos está ampliando los límites de sus padres y están incorporando nuevas ideas estadounidenses de urbanismo"
Superar la brecha generacional
Martinez creció en el entorno de los bares, mirando cómo sus padres llevaban adelante una serie de bares latinos tradicionales en el Este de LA y otros lugares, llamados bares paisa, a los cuales describe como lugares a los que iban hombres con sombreros de vaquero a beber y escuchar antiguas canciones en español.
“Siempre me gustó ver a mi padre ser respetado como el jefe y a mí estar tan orgullosa de ser su hija”, dice Martinez.
Sin embargo, cuando llegó la hora de abrir su propio bar, Martinez tenía una estrategia diferente, lo que sorprendió y confundió a sus padres. Querían abrir el bar tan pronto como tuvieran las llaves del edificio, arreglarlo gradualmente al mismo tiempo que generaban ingresos, pero Martinez dijo que no. Ella tenía una visión diferente para el bar, sobre el arte, la música, las bebidas.
Lupe Martinez, la madre de Angie, quien ayuda en el aspecto comercial de la operación, admite que al principio no entendía la visión de su hija. “Siendo los padres, viendo a nuestra pequeña hija, pensando que no sabe, que jamás ha hecho algo así antes, pero que nosotros sí. Nosotros tenemos mucha más experiencia que ella”, dice Lupe Martinez, “Pero, al final, decidimos permitir que lo hiciera”.
Combinar arte, música y redes sociales
“Las personas van a los bares para anestesiar su dolor, es como el Novacane. Es como lo que cantó Frank Ocean (artista de R&B). Por eso siempre me dije a mí misma que, cuando abriera mi bar, lo iba a llamar Novacane, porque las personas vienen a escaparse de la realidad”, dice Angie Martinez.
Una de las primeras cosas que hizo fue encargar a artistas que pintaran murales dentro y fuera del bar, incorporando letras de sus canciones favoritas. “Fue genial poder encontrar a los artistas perfectos para mi visión... Fue muy costoso, pero me alegra mucho haberlo hecho porque le dio vida al bar”, dice. Los murales ayudaron a que el bar se destacara y a definir una identidad visual diferente. “Muchas personas se toman fotografías en ellos y luego las etiquetan. Es genial ver todo en las redes sociales. Y ahí las personas ya saben que estás en Novacane, ¿entiendes?”
Por su trabajo como modelo, Angie Martinez tiene muchos seguidores en las redes sociales y usó ese recurso para hacer conocer Novacane, una herramienta poderosa que Lupe Martinez no entendió hasta el día de la inauguración.
“Al principio yo me decía, ¿cómo se van a enterar las personas de que siquiera estamos acá? Y después, tan pronto como abrimos, empezamos a ver personas que venían y nos felicitaban, muchos clientes habituales, y de hecho ya hemos formado nuestra clientela”, dice Lupe Martinez.
"Estoy intentando enseñarle a Angie a ser una mujer de negocios. No es sencillo"
Bebidas únicas
Angie Martinez también rompió con la tradición en el menú de bebidas. Les pidió a los distribuidores cervezas artesanales y contrató a un asesor de cócteles para que la ayudase a crear nuevas mezclas culturales, como “Bombay”, que tiene ron, té tailandés, crema de coco y canela.
“Rich Kids” lleva el nombre de una canción de Frank Ocean y tiene vodka de manzana Ciroc, whisky americano de manzana Jim Beam, mezclado con manzanas Granny Smith, agave y zumo de lima.
“Todo es fresco, cortamos todo nosotros mismos diariamente. No hay nada concentrado, todo es orgánico”, dice Angie Martinez.
“Ella eligió la cerveza y el licor. No sabía nada sobre whisky, ahora me gusta”, dice Lupe Martinez. “Antes solo era tequila y vodka, pero ahora me gusta el whisky. Me dije, ‘está bien, yo también estoy aprendiendo’”.
La destreza comercial de mamá
Angie también tenía mucho que aprender de su madre. Al principio, Lupe Martinez dice que los funcionarios de la ciudad se negaban a emitir el permiso porque no comprendían la visión de Angie. Lupe Martinez no aceptaría un no como respuesta.
“La ciudad pensaba que tan solo estábamos abriendo otra cantina mexicana y la ciudad ya no quiere más de eso, por lo que me resultó realmente difícil convencerlos y lograr que nos dieran el permiso para abrir”, dice la madre de Martinez. “Cuando lo hicimos, nos visitó el concejo municipal, el alcalde y diferentes organizaciones, que nos felicitaron y nos preguntaron en qué nos podían ayudar o si queríamos expandirnos”.
La importancia de la perseverancia es algo que Lupe Martinez está intentando enseñarle a su hija, quien encabeza un personal conformado solo por mujeres.
“Estoy intentando enseñarle a Angie a ser una mujer de negocios. No es sencillo”, dice. “Especialmente cuando tienes todas estas jóvenes trabajando para ti, por lo que estoy intentando enseñarle a ser coherente y responsable para que puedan observarla y aprender de ella y tomarse el trabajo en serio”.
El financiamiento
Cuando se materializó la idea del bar, Lupe Martinez se acercó a Sherrie Carr, vicepresidenta y gerenta de la sucursal del centro de LA de East West Bank, con quien ya había trabajado durante más de una década.
“Confiaron en mi visión sobre lo que quería hacer con este negocio y han estado trabajando conmigo hasta que logramos hacerlo. Aquí estamos y jamás me faltó apoyo”, dice Lupe Martinez.
“Como este es un local nuevo, hubiera sido difícil obtener un préstamo comercial convencional y un préstamo de la SBA hubiera llevado demasiado tiempo”, dice Carr. “Pero utilizamos capital de una inversión inmobiliaria para favorecerlos con un costo bajo. Ahora su sueño se hizo realidad. Heredé muchos de los hijos de mis clientes, que son adultos. Confían y creen en mí para ayudar a la próxima generación”.
El futuro
Rojas dice que los hijos de inmigrantes están “incorporando tendencias estadounidenses en sus prácticas culturales, sociales y económicas”, y Novacane es un buen ejemplo.
Angie Martinez trabaja seis días a la semana en el bar y su madre está a su lado en la cocina, haciendo recetas familiares favoritas, desde burritos de camarones y quesadillas de pollo, a giros de clásicos, como los frijoles puercos con estilo vegano.
“No es la comida normal de bar”, dice Angie Martinez. “Muchas personas vienen solo a comer porque sirvo comida para vegetarianos, veganos, pescetarianos y carnívoros”.
Y el favorito de los milenarios, nachos con Cheetos calientes y queso, es gratuito si te registras en Yelp. Juntas, madre e hija están poniendo lo mejor de ambas generaciones sobre la mesa. Y dicen que los comentarios son alentadores.
“Toda la comunidad viene aquí y me dicen ‘Nunca pensé que habría un bar genial como este en nuestra ciudad, gracias por probar suerte aquí’. Y me hace sentir realmente bien, me motiva más”, dice Angie Martinez. “Esta generación se está quedando a cargo ahora, estamos cambiando el juego, de una manera excelente. Por lo tanto, es realmente genial”.